EN EL AGUA

Os presento mi primera tarta de dos pisos, biennnnn!!!!

Ha sido todo un mundo poder hacerla, tenía muchas dudas sobre el procedimiento pero finalmente quedó bien.

Lo primero que hice fueron los bizcochos, el de arriba de crema de cacahuete relleno de mermelada de grosellas y ganache de chocolate, y el de abajo de brownie de chocolate blanco rellano de mermelada de fresa con buttercream de chocolate.

No sabía muy bien como seguir, así que decidí que tenía que forrar de fondant el bizcocho de abajo, me puse manos a la obra. A la vez fui poniendo una pajita rellena de alambre durito (hilo de cobre) para poder "apuntalar" la tarta y que así el bizcocho superior fuera unido al bizcocho inferior.

Una vez preparado el bizcocho de abajo, forré de fondant el de arriba. Lleva una capa azul en la parte más alta, y los laterales lleva otra capa de fondant negro y marrón mezclados, imitando a la madera.

Debajo de este bizcoho puse una especie de plato hecho de cartón y plástico, para que así el almíbar del bizcocho superior no dañara al inferior. En un principio tenía un estupendo plato comprado en una tienda de repostería, pero resultó que su diámetro era superior al de mi bizcocho, y deprisa y corriendo tuve que localizar un cartón para recortarlo y forrarlo con plástico transparente. Este invento no me fue mal del todo, pero admito que tengo que mejorar la técnica.

Y llegó el momento de meter el bizcocho pequeño con plato incluido, por la pajita que ya estaba clavada en el bizcocho inferior... nervios, estrés, sudores... y sí!!! sin ningún tipo de problema ya tenía mis dos pisos de la tarta unidos totalmente. Así no se moverían ni saldrían volando uno para cada lado.

Y por último, aunque para nada lo menos importante, adorné los dos bizcochos. Al de abajo le hice unas hojas de fondant verdes y unas flores de colorines.

Y al de arriba le puse un hipopótamo saliendo del agua, junto con su patito de goma (básico para cualquier baño que se precio, jeje), y su flotador. También hice burbujitas y gotitas.

He de confesar que la figura principal no iba a ser un hipopótamo, sino una vaca, pero al moldearla en fondant me quedó tan tan mal que decidí en el último momento sustituirla por una figura que me resultara más fácil de hacer.

Os pongo la foto de la vaquita, que con todo el dolor de mi corazón acabó en el basura (estaba tan manoseada que era imposible hacer otra cosa con ella).

Estoy muy orgullosa de mi tartita, así que os pongo otra foto para que veáis lo mona que queda vista desde arriba.

 

Y esta ha sido mi primera experiencia con las tartas de pisos. Muchas horas de trabajo, mucho paciencia pero que al final mereció la pena porque gustó mucho.

Siguiente reto: una tarta con tres pisos, aaaaahhhhh!!!