Hola! La receta que os enseño hoy es la adaptación de un flechazo bloguero repostero que tuve hace unas semanas.
Mi historia con la crema de cacahuete ha ido evolucionando a mejor. Cuando era peque, no recuerdo la edad, la probé por primera vez en casa de una amiga cuya hermana vivía en Londres y les había llevado un bote. Aquello era un producto exótico, extraño, del que solo habíamos oído hablar y que se tenía que consumir poco a poco para que durara más porque a saber cuándo llegaría otro bote. Recuerdo perfectamente que lo probé untado en pan de molde y me enamoré al instante de ese sabor.
Después yo misma hice un viaje a Londres y me traje unos cuantos botes. Cuando en el Duty Free empecé a cargar, las amigas que venían conmigo se quedaron flipando con la cantidad tremenda que pude comprar. Pero es que era una oportunidad de oro porque no sabía cuándo volvería a hacerme con más "mercancía"
Y la primera vez que viajé a EEUU me pasó lo mismo, en la tienda del hotel la vendían y cargué todo lo que el espacio sobrante en mi maleta me permitió.
Afortunadamente ahora es mucho más fácil conseguir la crema de cacahuete, de hecho es un producto más en casi todos los supermercados. Si incluso las hay de marcas blancas!!! Que por cierto no voy a dar nombres, pero a mí me parece que la calidad en este caso deja bastante que desear...
Y ahora confieso que en casa siempre hay un bote de crema de cacahuete listo para ser utilizado, vive en un mueble junto con la Nocilla :)
Al lío, vamos con esta estupenda receta que encontré en el blog Carrot Cake y que me impresionó tanto que no pude evitar adaptarla para hacer estos tarritos.
250g queso de untar (tipo Philadelphia)
1 sobre de cuajada
1 vaso de azúcar
medio vaso de leche tibia
500ml de nata para montar a temperatura ambiente
300g de crema de cacahuete
medio paquete de galletas
40g de margarina derretida en el microondas.
1 sobre de cuajada
1 vaso de azúcar
medio vaso de leche tibia
500ml de nata para montar a temperatura ambiente
300g de crema de cacahuete
medio paquete de galletas
40g de margarina derretida en el microondas.
Lo primero es triturar las galletas. Yo lo hice en la Thermomix, 10-12 segundos a velocidad 8 con 3 golpes de turbo. Se mezclan con la margarina que hemos derretido y se pone como base de los tarritos.
En un cazo se pone la nata, el queso, el azúcar y la crema de cacahuete. A fuego lento se va calentando sin parar de remover con una cuchara de madera para así evitar que se vaya pegando la mezcla en el fondo y que no se caramelice.
En el vaso de leche tibia disolvemos la caujada, y esta mezcla la echamos a la del cazo. Seguimos moviendo todo hasta que comience a hervir un poco.
Como habrán quedado grumitos pasamos la batidora.
La mezcla ya está lista para rellenar los tarritos. Se deja que se enfríen completamente y después se meten unas 20-24 horas en el frigo.
Con estas cantidades salen unos 6-8 tarritos, depende del tamaño de los mismos.
A la gente que no le guste la crema de cacahuete casi seguro que este postre no le va a entusiasmar. Pero a los que sí les guste como a mí, os aseguro que repetiréis.
Besos!
Besos!